Estrategias de empresa y marca digital
Desarrollo de marca digital
Análisis de sector
Evaluación del mercado digital de un determinado sector
Análisis sector
Evaluación del mercado digital de un determinado sector.
Análisis competidores online
¿Qué hace la competencia? Identificar oportunidades y amenazas.
Análisis competidores online
¿Qué hace la competencia? Identificar oportunidades y amenazas.
Audit marca digital
Estado de la empresa en desarrollo digital.
Audit marca digital
Estado de la empresa en desarrollo digital.
Estrategias de crecimiento
Determinar el nicho de mercado digital, estrategias y herramientas a implementar.
Estrategias de crecimiento
Determinar el nicho de mercado digital, estrategias y herramientas a implementar.
Identidad de marca digital
Adecuación de la marca al entorno online
Identidad de marca digital
Adecuación de la marca al entorno online
Herramientas y tecnologias
Determinar qué tecnologías son las adecuadas para la expansión digital.
Herramientas y tecnologías
Determinar qué tecnologías son las adecuadas para la expansión digital.
Clientes y fidelidad a la marca
Situación de conexión con los clientes y fomento de compras.
Clientes y fidelidad a la marca
Situación de conexión con los clientes y fomento de compras.
Gestionar y medir resultados
Asumir el control de la marca digital y controlar en adelante su evolución.
Gestionar y medir resultados
Asumir el control de la marca digital y controlar en adelante su evolución.
El valor de una marca digital
Una marca digital debe tener valor racional para su propietario y otro más emocional aunque no por ello exento de sentido de utilidad para el cliente: ¿qué me aporta esta marca? ¿Por qué me gusta? ¿Qué me trasmite, de qué cosas me habla? Serán algunas de las cuestiones que el usuario se pregunta.
Las marcas digitales nativas: Facebook, Google, Youtube, Ebay, Amazon, Uber, etc, adquieren su valor en relación al servicio que ofrecen, cómo lo hacen y dónde; es decir, online. Google sigue siendo una de las marcas preferidas por millones de usuarios gracias a un amplio catálogo de servicios digitales sin un carácter físico.
Una buena parte de las marcas actuales cuentan con una doble vida: la física, en su contacto diario con los usuarios (la experiencia, el producto o servicio en sí mismo) y otra digital y desmaterializada (relacional y facilitadora).en la nueva relación que construye con sus clientes en el ámbito online: Internet, Redes Sociales… Y ambas están íntimamente ligadas.
La contribución digital al valor de la marca reside en su capacidad de crear una experiencia complementaria al cliente, acompañándolo, manteniendo y prolongando la relación.